Una victoria para creer. El Recreativo ha cercenado su serie de dos derrotas consecutivas con un brillante triunfo en el campo del Talavera (2-3). El Decano no sólo superó sus problemas extradeportivos, también supo remontar huyendo del fútbol tostón que viene practicando esta temporada.
Los albiazules demuestran y se demuestran así mismos que también saben ganar en un manicomio de partido y José María Salmerón, magnífico en la lectura del encuentro y en los cambios, debe tomar buena nota de ello. Un Recre más alegre no sólo es deseable, también es posible.
El técnico recreativista introdujo un cambio en relación a su anterior once. Iago Díaz se quedó en el banquillo para beneficio de Carlos Martínez, que regresaba a la titularidad ocho jornadas después. El resto, los mismos que tan buena imagen ofrecieron la pasada semana ante el líder Melilla, si bien, sin el refrendo de un resultado positivo.
Los habituales minutos de tanteo se vieron interrumpidos por la primera gran ocasión de la tarde. Víctor Barroso golpeó con toda la picardía del mundo, pero la suerte le fue esquiva y la pelota dio en el larguero. La jugada sirvió para que los dos bandos tocaran zafarrancho de combate y las aproximaciones se sucedieron en un portería y en otra.
La mejor opción local fue un remate de Laerte que pasó cerca del palo. Lo mismo sucedió con un intencionado testarazo de Caye Quintana a centro de Diego Jiménez. Y en medio del pim-pam-pum llegó el gol del Talavera. Víctor Andrés cazó un rechace en el área onubense y marcó a placer. Y aún tuvo Marc Martínez que evitar el segundo con un paradón a Cristian Fernández.
Del obligado pase por la caseta salió un Recre ‘nuevo’. Salmerón retiró a Víctor Barroso y Llorente para meter a Pina y Borja Díaz en un 5-3-2. Estando por detrás en el marcador, no parecía la idea más feliz quitar un extremo para sumar un quinto defensa. Pero el preparador almeriense vio algo que nadie había conseguido ver para cambiar el partido.
Porque los cambios fueron el prólogo de la remontada. En el empate, Tropi habilitó a Carlos Martínez y Caye Quintana le puso la guinda del gol al centro del cordobés. Y sin tiempo para festejarlo, llegó el segundo, obra también del delantero de Isla Cristina después de un gran servicio de Alberto Quiles. Todo en dos minutos mágicos para el Decano.
La locura siguió presidiendo el encuentro, pues acto seguido el árbitro cobró penalti por manos de Carlos Martínez. Espinar lo lanzó ajustado al palo, pero hasta la esquina voló Marc Martínez en la parada de la tarde. Y Salmerón también acertó con el último cambio, toda vez que Lago Díaz, saliendo del banquillo, fue el encargado de rubricar el éxito albiazul con un contragolpe letal en el tiempo de descuento.
Un gol de lo más oportuno, pues un pestañeo después Luis Madrigal hacía la segunda diana del Talavera, poco antes de que el colegiado pitara el final. El Recreativo se reencuentra con el triunfo y vuelve a mirar al ‘play-off’ de ascenso. Y lo hace con tres goles, un buen puñado de ocasiones y mejor fútbol. Porque incluso cuando se gana, el cómo también importa. diariodehuelva.es
